viernes, 21 de noviembre de 2008

¿NECESITARÁ COLIRIO?
Hace tiempo que no hablo de mi “hermano pródigo”. Pensé que podría estar reflexionando sobre sus ataques a Prado Nuevo, y que vería algo de luz, que le permitiera cambiar de actitud. Yo siempre espero que las personas, si reflexionan, puedan cambiar positivamente, (aquí está la clave, la reflexión).
Pues no, me equivoqué. El pasado día 14, en el Programa de TVE, “Esta Mañana”, intervino telefónicamente, con motivo del sobreseimiento y archivo de la querella que había presentado contra Luz Amparo Cuevas y diez de sus colaboradores.

Está obcecado. Está enfadado. Y va a recurrir el auto de la juez. No acepta la decisión de una juez, que después de la investigación realizada, entra a desarrollar en 9 folios, los argumentos jurídicos y el fallo adoptado, sin encontrar indicios de culpabilidad. Y todo ello sobre los 4 delitos que él acusaba a Luz Amparo.
Repasando el libro del Apocalipsis, en el Capítulo 3º, en la Carta dirigida a Laodicea, he encontrado la acusación que Jesucristo hace a esta Iglesia. San Pablo se preocupó mucho de ella, pero algunos decenios después falló completamente, de ahí la condena de Cristo, por su tibieza y su falsa orientación hacia el mundo y le acusa de desdichado, miserable, pobre, ciego y desnudo. A pesar de todo, Jesús le ofrece ayuda y gracia, que le dará vista suficiente para conocerse de veras y cambiar.
Creo que es eso lo que le falta a mi “hermano pródigo”, no se conoce realmente y necesita el colirio divino para ver la importante Obra de Dios en Prado Nuevo.
Sigamos rezando para que llegue a ver con claridad.

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